¿Quieres comprarte un coche eléctrico y tienes dudas sobre como se carga su batería? Descubrimos los cuatro modos de carga para las baterías de los vehículos eléctricos. Tres de las cuales van con corriente alterna y una de estas cuatro utiliza corriente continua.
Modo de carga 1: Corriente alterna.
El primer modo funciona con un enchufe shuko (no industrial), y con una base doméstica. El tiempo de carga irá en función de la batería. Recomendamos realizar la carga por la noche, cuando la demanda energética es menor.
Empleando la intensidad y el voltaje eléctrico de la misma vivienda el vehículo se carga en un dispositivo enchufable normalizado en la red monofásica. En el caso de cargar en la red trifásica al tener una potencia superior la carga será más rápida.
La parte negativa del primer modo de carga es la inseguridad porque las infraestructuras antiguas no tienen la protección de interruptor diferencial. A demás de la lentitud y el posible sobrecalentamiento. Por lo que este modo sirve más para recargar ciclomotores.
Modo de carga 2: Corriente alterna.
En este caso el modo de carga es lenta, con enchufe y base similar a la anterior, de tipo no exclusivo, estándar.
La diferencia es que esta lleva un interruptor diferencial de protección y en el cable lleva sistema de protección. De esta manera evitamos la mala conexión entre la red y el vehículo. El conector de carga para infraestructuras se enchufa en la caja de carga y el conector del cargador del vehículo se introduce en la entrada de éste.
- Intensidad normal 16 amperios. Pero permite hasta 32.

Modo de carga 3: Corriente alterna.
En este modo, la carga es semi-rápida. Este modo debido al sistema de alimentación, a la protección y el control incorporado al punto de carga que la monitoriza y detecta su conexión. Este modo se realiza mediante un cable de carga conectado fijamente al punto de carga, cuyo conector de carga para los vehículos se enchufa en la entrada del mismo.
- Intensidad normal 32 amperios. Pero permite hasta 63.
- Potencia entre 8 y 14 kw.
En monofásica, para conseguir la carga completa (unas 3 horas) necesita menos de la mitad de tiempo que los dos anteriores modos de carga. Buena solución para cargar vehículos (sobre todo en horario nocturno) en aparcamientos y viviendas particulares.
En trifásica, la intensidad es de 63 amperios y la potencia entre 22 y 43 kw. Por lo que se reduce el tiempo de carga hasta poco mas de media hora.
Este modo de carga emplea tecnología inteligente (Smart Grids) se utiliza en zonas públicas, aparcamientos y centros comerciales
Modo de carga 4: Corriente continua.
El último modo de carga se recomienda para hacer las cargas “rápidas”.
En este tipo de carga denominada “electrolinera” se transfieren potencias de carga elevadas. En la carga DC el transformador AC/DC esta de forma fija en el punto de carga por lo que se evita pérdida de calentamiento o energía.
En este modo operativo de carga de un vehículo eléctrico, al igual que en el anterior y como consecuencia de la seguridad, la conexión enchufable se hace sólo del lado del vehículo, estando integrado el conector en el lado de la infraestructura.
- Intensidad hasta 400 amperios.
- Potencia máxima entre 125 y 240 kw.
El tipo resulta muy costoso por el momento porque necesita una infraestructura específica.
Especificaciones: DC (corriente continua) / AC (corriente alterna)